Con el auto de la casa de Maranello, el marplatense Marcos Siebert tuvo la posibilidad de conducir la GT3 296 desde la parrilla de largada, iniciando en un complicado arranque hasta la mitad de la competencia, donde se vivieron momentos de tensión debido a la demora ocasionada por un accidente de otro de los pilotos que se encontraban en carrera.

El recambio de conductor y las estrategias generales de los equipos es uno de los atractivos que tiene la divisional, y en este caso el conjunto oficial Ferrari trabajó bien para repostar el #52 y hacer que Marcos pudiera entregar el volante para que el belga Jeff Machiels siguiera hasta la bandera a cuadros.

La clasificación de la competencia ubica al piloto argentino en una muy buena performance, donde la Ferrari 296 GT3 del equipo oficial Ferrari AF Corse fue el mejor auto de la marca dentro de ubicación definitiva de la competencia, en la que un Aston Martin, un Mercedes Benz y un BMW ocuparon los tres lugares del podio.

Siebert volverá a correr por la próxima fecha del campeonato en la divisional Sprint, la más veloz del calendario de las carreras del World Challenge Eurepean GT en Francia, en el trazado de Magny Cours, uno de los circuitos clásicos que tiene el automovilismo internacional y la categoría GT3 en especial.